viernes, 16 de diciembre de 2011

Decrecimiento. Carlos Taibo. (2ª parte)

 “EN DEFENSA DEL DECRECIMIENTO” CARLOS TAIBO (40últimas líneas)

RESUMEN:

Continúa el autor explicando su teoría del decrecimiento. Dice que no es suficiente reducir el consumo. Cree preciso que el altruismo y la redistribución de los recursos guíen la nueva sociedad. Propone una economía local frente a la global y la creación de nuevos puestos de trabajo en el ámbito del ocio y del cuidado del medio ambiente. Acaba diciendo que si no lo hacemos voluntariamente tendremos que hacerlo obligados por el hundimiento del actual sistema económico y social en el que vivimos.

TÍTULO:

O cambiamos o nos hundimos / ¿Es posible otra manera de vivir? 

ANÁLISIS:

Fragmento final de un texto  de análisis social y económico que Carlos Taibo publica en su blog. Tiene la forma de un artículo de opinión.
Es un texto sobre todo argumentativo. Utiliza también  la exposición.
Está escrito en un español de registro estándar. Dada la complejidad del asunto tratado (economía, valores, nuevas propuestas) y la fórmula escogida (artículo de opinión en su blog, es decir, un texto para ser leído por multitud de personas a las que interese el tema) el autor se expresa con cuidado buscando la precisión y la acumulación de argumentos que apoyan su tesis. Hay algún cultismo (obsesivo, satisfacción, complejos fabriles…) pero también hay muchas pequeñas ayudas que facilitan la comprensión del texto: repeticiones y abundancia de conectores : a buen seguro, claro, hablando en plata, estamos pensando como no, si el primero… el segundo, por qué no, claro, al fin y al cabo, no es preciso agregar, antes bien, al margen de lo anterior, y es que).
De las funciones del lenguaje, teoría de Jakobson, aparecen aquí la referencial, pero sobre todo la expresiva (el emisor se posiciona  planteando comentarios subjetivos-por ej. la última palabra del texto “padecemos”- )  y la argumentativa. La finalidad del texto es hacernos cambiar el punto de vista sobre los problemas que la crisis actual conlleva, quiere, nada menos, que cambiemos nuestra forma de vivir.
La estructura de todo el artículo es encuadrada. Si nos ceñimos al fragmento sería inductiva, es decir, la tesis al final.
El tema principal es su propuesta de cambio, que él resumen en una palabra: decrecimiento. Otros: los problemas de los recursos que son limitados, ecológicos, de salud, de justicia social, nuevos empleos etc
A nivel de gramática destacaré el uso del presente de indicativo en su forma sencilla o perifrástica –para indicar  algo general- ( es, hablan, deben tomar, estamos pensando…); del condicional –para indicar posibilidad-: podría llevar , se derivaría, se sumaría, implicaría…  También hay algún pasado pero muy pocos (fue cayendo). Hay un claro predominio de los nombres abstractos (reducciones, niveles de producción, sociedades opulentas…) dado el ámbito temático y el corte intelectual del análisis. Destacan los campos semánticos de la economía (reducciones, niveles de producción y consumo, reorganizar, sociedades,  triunfo, redistribución, recursos, consumo…) pero también el de la ética ( altruismo, otros valores, reparto del trabajo, sobriedad, simplicidad voluntaria…)

OPINIÓN:

 Creo que sí, que tiene razón. Otra forma de vivir, más sencilla y con el predominio de otros valores (la solidaridad y el contacto con la Naturaleza) nos haría más felices y nos ahorraría muchas angustias.

Vivir despilfarrando, llevar un tren de vida desenfrenado, que es lo que estamos haciendo en el primer mundo, es insostenible. En primer lugar, porque la gente pobre (y son muchos millones en el mundo) no nos lo va a permitir. Ya podemos poner barreras y construir miles de kilómetros de murallas  que impidan el acceso de los del tercer mundo al primero, la gente va a cruzarlas y los emigrantes van a seguir llegando. En segundo lugar porque el medio ambiente nos está ya pasando factura y las alarmas están sonando con urgencia. Pero sobre todo, y esta es para mí la razón principal, porque esta forma de vivir basada en el consumo desenfrenado no da la felicidad, que es a lo que todos aspiramos.     

martes, 29 de noviembre de 2011

comentario nº 7



“En defensa del decrecimiento” Carlos Taibo   -sólo comento los tres primeros párrafos-

RESUMEN:

En este texto se dice que el crecimiento económico ininterrumpido no es la solución a todos los problemas porque daña el medio ambiente, agota las materias primas y  la espiral del consumo vuelve a la gente más infeliz. Propone, por todo ello,  que en los países ricos se reduzca la producción y el consumo ya que el actual ritmo resulta insostenible.

TÍTULO:

Necesitamos calma para no estrellarnos / Reflexionando sobre dónde queremos ir.

ANÁLISIS:

Fragmento de un artículo de opinión de Carlos Taibo que aparece en su blog “Nuevo DESorden”. Por el contenido es un texto humanístico que trata de economía pero   que propone una orientación a los problemas actuales  basada en la ética y no como una forma de buen comportamiento sino como la única solución a medio y largo plazo para la Humanidad.

Es un texto expositivo y argumentativo: ordenado, con verbos en presente (sugiere, es, genan etc) , con construcciones impersonales (hay que..., se nos dice...) y que invita a la reflexión con una propuesta razonada sobre la necesidad de consumir menos en aquellos países -los ricos- donde el consumo está disparado.

El lenguaje utilizado por Carlos Taibo es un español escrito en un registro medio a veces alto: las frases son largas, sin errores sintácticos, con algún cultimo -opulenta, panacea, cohesión, decenios...- pero básicamente es un texto que se entiende con facilidad y que va dirigido a un público heterogéneo. El texto quiere convencer sobre la necesidad de cambiar muchos de nuestros hábitos.

De las funciones del lenguaje, teoría de Jakobson, aparecen la referencial, porque informa, la apelativa, porque quiere convencer, y  la expresiva, porque el autor se posiciona “hay que reducir la producción y el consumo porque vivimos por encima de nuestras posibilidades”.

Estos tres párrafos son el comienzo del artículo.  El primero se inicia con la idea generalizada de que es necesario crecer económicamente para solucionar los problemas, teoría que el autor echa por tierra recordando los problemas ecológicos y sociales que conlleva. En el segundo insiste en estos últimos problemas: obesidad, estrés, contaminación, nuevas enfermedades... El tercero y último para nosotros propone una solución: el decrecimiento económico. Así pues estamos ante una estructura textual inductiva con la tesis al final de la argumentación.

El tema principal es el decrecimiento económico; los secundarios la contaminación, la obesidad, el estrés, la  calidad de vida etc.

De cómo está escrito el texto sólo remarcaré su claridad. Parece que el pensamiento de Carlos Taibo sobre el tema sólo está regido por el sentido común. Por comentar algo señalaré el anglicismo “blog” con esa terminación de palabre imposible en castellano, y una de las palabras del título de su blog Nuevo  DESorden, con un juego de mayúsculas y minúsculas sugerente ya que rompe con lo ordinario y sintetiza la idea: el desorden que propone implica un nuevo orden.

OPINIÓN :

  Es difícil no estar de acuerdo con lo que dice el texto si partimos de que nuestra finalidad en el mundo  no es la de ganar dinero por encima de todo. El querer siempre más y más es una posición muy extendida en el mundo real : pensemos por ejemplo en los bancos y en esa expresión que solemos decir “no tienen corazón” y es verdad sólo tienen una calculadora que va anotando números.

Uno de los problemas de nuestra época es que hacemos mucho, muchísimo de todo y reflexionamos poco sobre qué queremos conseguir, hacia donde nos lleva esta carrera alocada del desarrollo sin fin

Por otra parte, ante los problemas actuales de nuestro país, con casi cinco millones de parados,  proponer el decrecimiento económico puede sonar a burla,  sobre todo si pensamos que el autor tiene asegurado un sueldo de profesor en la Universidad Autónoma de Madrid y nosotros, estudiantes, tenemos un futuro profesional negro como la pez. Pero pasemos por encima de las circunstancias personales y pensemos en lo que dice el texto. ¿Tiene o no tiene razón? Yo creo que sí. Los recursos son limitados, el daño al medio ambiente suele ser irreparable y acumular no nos hace más felices. Debemos, todos, cambiar y no dejar que los que nos mandan (empezando por los bancos) sólo se rijan por los números sin tener en cuenta otros muchos problemas.
Solidaridad creo que es  palabra clave para el futuro y también moderación como nos enseñaron los filósofos de la antigüedad.

domingo, 27 de noviembre de 2011

COMENTARIO PAU LA RIOJA 2 (para hacer esta semana; solo los dos primeros párrafos)

EN DEFENSA DEL DECRECIMIENTO. Carlos Taibo.
Profesor Titular de Ciencia Política y de la Administración en la Universidad Autónoma de Madrid. Del blog “Nuevo DESorden”

La visión dominante en las sociedades opulentas sugiere que el crecimiento económico es la panacea que resuelve todos los males. A su amparo -se nos dice- la cohesión social se asienta, los servicios públicos se mantienen, y el desempleo y la desigualdad no ganan terreno. Sobran las razones para recelar, sin embargo, de todo lo anterior. El crecimiento económico no genera -o no genera necesariamente- cohesión social, provoca agresiones medioambientales en muchos casos irreversibles, propicia el agotamiento de recursos escasos que no estarán a disposición de las generaciones venideras y, en fin,  permite el triunfo de un modo de vida esclavo que invita a pensar que seremos más felices cuantas más horas trabajemos, más dinero ganemos y, sobre todo, más bienes acertemos a consumir.
Frente a ello son muchas las razones para contestar el progreso, más aparente que real, que han protagonizado nuestras sociedades durante decenios. […] Muchos expertos concluyen, en suma, que el incremento en la esperanza de vida al nacer registrado en los últimos decenios bien puede estar tocando a su fin en un escenario lastrado por la obesidad, el estrés, la aparición de nuevas enfermedades y la contaminación.
Así las cosas, en los países ricos hay que reducir la producción y el consumo porque vivimos por encima de nuestras posibilidades, porque es urgente cortar emisiones que dañan peligrosamente el medio y porque empiezan a faltar materias primas vitales. Por detrás de esos imperativos despunta un problema central: el de los límites medioambientales y de recursos del planeta. Si es evidente que, en caso de que un individuo extraiga de su capital, y no de sus ingresos, la mayoría de los recursos que emplea, ello conducirá a la quiebra, parece sorprendente que no se emplee el mismo razonamiento a la hora de sopesar lo que las sociedades occidentales están haciendo con los recursos naturales. […].
A buen seguro que no es suficiente, claro, con acometer reducciones en los niveles de producción y de consumo. Es preciso reorganizar nuestras sociedades sobre la base de otros valores que reclamen el triunfo de la vida social, del altruismo y de la redistribución de los recursos frente a la propiedad y al consumo ilimitado. Hay que reivindicar, en paralelo, el ocio frente al trabajo obsesivo, como hay que postular el reparto del trabajo, una vieja práctica sindical que, por desgracia, fue cayendo en el olvido. Otras exigencias ineludibles nos hablan de la necesidad de reducir las dimensiones de las infraestructuras productivas, administrativas y de transporte, y de primar lo local frente a lo global en un escenario marcado, en suma, por la sobriedad y la simplicidad voluntaria.
Hablando en plata, lo primero que las sociedades opulentas deben tomar en consideración es la conveniencia de cerrar -o al menos de reducir sensiblemente la actividad correspondiente- muchos de los complejos fabriles hoy existentes. Estamos pensando, cómo no, en la industria militar, en la automovilística, en la de la aviación y en buena parte de la de la construcción. Los millones de trabajadores que, de resultas, perderían sus empleos deberían encontrar acomodo a través de dos grandes cauces. Si el primero lo aportaría el desarrollo ingente de actividades en los ámbitos relacionados con la satisfacción de las necesidades sociales y medioambientales, el segundo llegaría de la mano del reparto del trabajo en los sectores económicos tradicionales que sobrevivirían. Importa subrayar que en este caso la reducción de la jornada laboral bien podría llevar aparejada, por qué no, reducciones salariales, siempre y cuando éstas, claro, no lo fueran en provecho de los beneficios empresariales. Al fin y al cabo, la ganancia de nivel de vida que se derivaría de trabajar menos, y de disfrutar de mejores servicios sociales y de un entorno más limpio y menos agresivo, se sumaría a la derivada de la asunción plena de la conveniencia de consumir, también, menos, con la consiguiente reducción de necesidades en lo que a ingresos se refiere. No es preciso agregar –parece que las reducciones salariales que nos ocupan no afectarían, naturalmente, a quienes menos tienen.
El decrecimiento no implicaría, para la mayoría de los habitantes, un deterioro de sus condiciones de vida. Antes bien, debe acarrear mejoras sustanciales como las vinculadas con la redistribución de los recursos, la creación de nuevos sectores, la preservación del medio ambiente, el bienestar de las generaciones futuras, la salud de los ciudadanos, las condiciones del trabajo asalariado o el crecimiento relacional en sociedades en las que el tiempo de trabajo se reducirá sensiblemente. Al margen de lo anterior, conviene subrayar que en el mundo rico se hacen valer elementos -así, la presencia de infraestructuras en muchos ámbitos, la satisfacción de necesidades elementales o el propio decrecimiento de la población- que facilitarían el tránsito a una sociedad distinta. Y es que hay que partir de la certeza de que, si no decrecemos voluntaria y racionalmente, tendremos que hacerlo obligados de resultas del hundimiento, antes o después, de la sinrazón económica y social que padecemos.

COMENTARIOS PAU LA RIOJA 1

Comentario de texto nº 4 Pérez Galdós Misericordia

“Sólo en nuestra sociedad heterogénea…” MISERICORDIA, Galdós
(Comentario nº 4)

RESUMEN:
En este texto el narrador reflexiona sobre el tipo de sociedad en la que viven sus personajes (que es la misma del autor), donde se mezclan las clases sociales. A continuación nos cuenta la historia de la decadencia del personaje Frasquito Ponte, que malvive desde 1859 y cuyos problemas para sobrevivir se acentúan más cada día, debido a su tonto orgullo .

TÍTULO:
“Decadencia de Frasquito Ponte” o “Malos tiempos para Frasquito”

ANÁLISIS:
Fragmento literario, de Misericordia , novela de Galdós publicada en 1897. Sabemos que es literario por el título, porque hay un narrador, unos personajes (Frasquito Ponte inventado por el autor, González Bravo político histórico español de la época), un espacio y un tiempo determinados.  Por el contenido, por lo que cuenta, diremos que trata aspcetos sociales, incluso sociológicos y sicológicos , acaecidos al personaje Frasquito Ponte.
Las modalidades textuales empleadas por Galdós en el texto son la argumentación (líneas 1-7 donde el narrador reflexiona acerca de nuestra sociedad heterogénea) y la narración (de la línea 7 al final, donde nos cuenta la decadencia de Frasquito “este pelagato fino” que comenzó en  el 59 y se agudizó a partir de la Gloriosa, revolución de 1868. Nos explica cómo “su naturaleza innata y su amor propio” han sido “como piedra atada al cuello para que más pronto se hundiera y se ahogara”)
La lengua utilizada por Galdós es el español  escrito  (sintáxis elaborado, precisión léxica…) en un registro medio. El tono un tanto arcaizante del texto obedece a que fue escrito en 1897.  
De las funciones del lenguaje, teoría de Jakobson,  aparecen aquí la representativa (el texto informa), la expresiva (el autor de alguna manera  se posiciona en lo que cuenta: hidalguetes,  empleadillos…), la argumentativa (en la primera parte, líneas 1-7 ,) pero sobre todo la POÉTICA (en Misericordia Galdós crea a partir de las palabras un mundo vivo, lleno de personajes, muchos de ellos –por no decir todos- grotescos, que viven o malviven, que tienen sus apuros, sus emociones y sus disputas… y todo lo consigue con el uso exclusivo del lenguaje)
La estructura externa es un único párrafo. A nivel interno, ya he dicho que distingo la reflexión del narrador  sobre nuestra sociedad y lo que nos cuenta sobre la historia personal del personaje Ponte (que por otra parte refleja mucho de lo que vivión la burguesía en esos años: en vez de trabajar y esforzarse se dedicó a presumir y a aparentar , lo que le llevó irremediablemente a la ruina)
El tema principal es la decadencia de Frasquito Ponte, secundarios ,pero también importantes,  son la revolución del 68, el tema de las cesantías, la falta de profesionalidad, la caída de González Bravo, las invitaciones a comer, el amor propio etc
Elementos lingüísticos y estilísticos destacables hay muchos.  Comentaré sólo algunos:
Los nombres con sufijos diminutivos despectivos (hidalguete, terruño, empleadillo, Frasquito ), el uso de locuciones  (sangre azul, horas de oficina, pelagato fino, apogeo social, amor propio… ), la alternancia de nombre comunes  (muchos de ellos abstractos y del campo semántico de las relaciones sociales : sociedad, escrúpulos, distinciones, hidalguete, marqueses, condes,  próceres del dinero , centros de falsa elegancia…) y propios (Frasquito Ponte , González Bravo). Es llamativo el uso de sintagmas bimembres: “ libre de escrúpulos y distinciones”, “un hidalguete o un empleadillo”,  “marqueses y condes”, “se junten y alternen”  … a veces incluso el sintagma tiene tres partes:  “y los que van a bailar, y a comer, y a departir con las señoras”, “por sus negocios, o sus vanidades, o bien por audaces amoríos”, “el día y la noche y la compasión de”  ….   Todo esto hace que el estilo sea más retórico (observemos el polisíndeton en los ejemplos últimos)  y ampuloso , en definitiva, más literario. Hay además alguna  comparación (“como piedra atada al cuello” ) y metáfora (“marcado en la tabla de su destino con trazo muy negro”). En cuanto al uso de verbos observamos el empleo del presente (fundamentalmente subjuntivo ) en la primera parte –líneas 1/7- (se da, se confundan, se junten y alternen, van a bailar… ) y el empleo de tiempos en pasado en la parte narrativa (se defendió,  desplomóse ,  se m urieron… ; pretéritos perfectos simples que alternan con pretéritos pluscuamperfectos – se había comido- y pretéritos imperfectos  de indicativo –gozaba, sentaban, se mostraban…-
En la sintaxis hay un predominio de oraciones compuestas coordinadas  (por ejemplo en las líneas 1-4, y proposiciones adjetivas  (línea 5,  8 etc).
COMENTARIO PERSONAL:
¿Vivir  para aparentar, como hace Frasquito en la novela,  tiene sentido? Yo creo que no. Somos lo que somos no lo que fingimos ser. Pero como esta costumbre de aparentar está tan extendida en nuestra sociedad hemos de andarnos con cuidado para no equivocarnos. Hemos de aprender a juzgar a la gente por lo que hace, no por lo que dice que hace o va a hacer. Si lo hiciéramos así muchos políticos lo tendrían crudo, algunas  mujeres con implantes en las mamas ligarían menos y la vida, en general, nos daría menos sustos.  
¿Por qué  hemos de tener miedo a mostrarnos como somos, con nuestras canas o nuestra calvicie? La vida deja huellas y , al menos para mi, todas las huellas son hermosas  .

COMENTARIOS PAU LA RIOJA

Comentario nº 6 Texto de Pérez Reverte sobre la Educación en España:



“Cuadrilla de golfos apandadores…”  Pérez Reverte  (comentario nº 6) /yo comentaré el texto completo/
RESUMEN:
El texto es una dura crítica contra las medidas tomadas por los políticos, de un signo y de otro, en la enseñanza pùblica española en los últimos 30 años. Los califica de “infames, irresponsables, incompetentes, desvergonzados”. Ataca con especial énfasis al actual presidente del gobierno al que tacha de “imbécil”.

TITULO:
Políticos y  Educación/  Suspenso bajo para los políticos españoles

ANÁLISIS:
Texto periodístico, artículo de opinión de Pérez Reverte, publicado en El Semanal el 1 de enero de 2008 /lo sé porque lo he mirado en Internet/
Todo el texto es rabiosamente argumentativo y utiliza la exposición de datos y nombres de importantes escritores y científicos  españoles para argumentar su tesis de la estupidez de los políticos de la democracia actual que han cambiado el sistema público de enseñanza para empeorarlo y todo por sus intereses partidistas.
Pérez Reverte, como es habitual en sus artículos periodísticos, utiliza un español escrito con una mezcla de rasgos coloquiales castizos , con expresiones malsonantes (ej “rediós” –línea última-, mentar la madre –l ínea 5- ) y un español estándar que incluye palabras cultas  (impávida –l 28-, Arcadia –l. 24-…), tambien introduce algún vulgarismo con intención estilística (por ej el “p’ adelante” –l 44-)
De las funciones del lenguaje, teoría de Jakobson, aquí las más  llamativas son la expresiva (el texto es ferozmente subjetivo), la argumentativa (el texto pretende que el lector  de este texto dominical piense y comparta la misma indignación ante los políticos que siente el autor del texto, y piense también, claro está, en cómo debería ser la educación) y la referencial o informativa. Tampoco hay que olvidar la poética pues el texto está muy elaborado con paralelismos, hipérboles, ironía, enumeraciones etc
La estructura externa son tres párrafos. Se presenta como si fuera un discurso y no un artículo periodístico más (claro está, que esto es un recurso retórico) en las líneas 1-5 : saluda a los políticos como si fuesen las autoridades presentes en el acto en el que él, Pérez Reverte,  va a hablar en público. Pero ese saludo lo transforma en un insulto : “Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda. Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Ministros y  ex ministros –aquí matizaré ministros y ministras- de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera.”. La ironía y la burla tiñen todo el saludo inicial, el exordio del discurso  -como decían los latinos- . Tras el saludo viene el cuerpo central: el análisis de las causas que han llevado, por la incompetencia y desvergüenza de los políticos responsables de la Educación en España, a que nuestro país esté entre los más incultos de Europa y nuestros jóvenes estén por debajo de la media en todas las  materias evaluadas, como demuestra el último informe Pisa del 2006.  Culpa  al PSOE por la LOGSE y al PP por su apoyo a la enseñanza privada o concertada frente a la enseñanza pública y a ambos partidos por permitir que las Autonomías tengan competencias en Educación  que han llevado a que la enseñanza en materias como la historia o la geografía sea sólo de lo particular y no de lo nacional.  Culpa a los políticos también por su impunidad y demagogia, en especial , culpa al actual presidente del que se ríe –risa amarga- por lo inexacto de algunas de sus afirmaciones: “hemos tenido muchas generaciones en España con un bajo rendimiento educativo, fruto del país que tenemos”. ¿Se le ha olvidado a Zapatero o es que no sabe que el país que tenemos es el de Cervantes, Quevedo, Galdós, Clarín o Machado?
Termina con una frase que condensa su rabia e impotencia: “Qué miedo me dais algunos, rediós. En serio. Cuánto más peligro tiene un imbécil, que un malvado”
El tema principal es la responsabilidad de los políticos en la educación de un país. Secundarios hay muchísimos: la Logse, la enseñanza pública y la privada, los escritores españoles, los políticos –ninguno se salva en el texto-, las autonomías etc.
A nivel lingüístico y estilístico, además de lo ya dicho, comentaré el “niet” de la l. 46, palabra alemana que significa “nada” (que es lo que tienen los políticos culturalmente planos), las siglas de los partidos políticos escritas como suenan (Pepè –l. 18- y Pesoe –l. 24- ) , las deformaciones intencionadas en algunos nombres propios como el “Ansar” ‘ganso’ para referirse a Aznar –l. 20- ) y las muchísimas expresiones populares “mentar a la madre” que a veces mezcla en el mismo sintagma con palabras cultas como el “cateta contumancia” –l- 16-

OPINIÓN:
Me dedico a la enseñanza desde hace muchos años y sé de qué estoy hablando. Pérez Reverte tiene razón en muchas cosas que dice en este artículo.  pero no ve toda la realidad. No todos los alumnos son unos ignorantes ni todos los políticos unos imbéciles.  No todas las clases en la enseñanza pública son un desastre, ni todos los alumnos maltratan al profesor.
 Los maestros, la mayoría gente honrada, intentamos siempre hacer lo mejor posible nuestra labor y aunque los políticos carguen a la escuela con lo que no debería ser su responsabilidad (por ejemplo la atención sanitaria a los alumnos: vacunas, revisiones bucales, prevención de embarazos y enfermedades de transmisión sexual, la educación vial y alimentaria y tantas y tantas cosas …)  cuando el profesor entra al aula trata de enseñar a sus alumnos, de transmitirles sus conocimientos y sus valores, en especial , su amor a la cultura. Casi siempre trata de enseñar a los jóvenes a  pensar, justo lo que no hacen los políticos. Así que para terminar,  suspendo a los políticos en educación y pongo un notable alto al profesorado español-